Ante el resultado de los comicios en los que más del 60 % de los electores de Buenos Aires reeligieron a Mauricio Macri como Jefe de Gobierno, resulta oportuno mirarse en el espejo de los italianos, con quienes tenemos tanto en común.
La gestión de Macri que finaliza, que ha hecho de la frivolidad su emblema, ha sido devastadora con la cultura. Obedeciendo a un programa diseñado para empobrecer el nivel educativo y cultural de la población, basta observar detalles más que simbólicos: muchas escuelas se caen –literalmente a pedazos; Macri se desentendió desde el principio del Teatro Colón y su situación hoy es alarmante; el Teatro San Martín sufre un estado de calamidad del que nadie sabe cómo o quién hará algo para salvarlo; Macri cerró los centros culturales en los barrios; ahora el Museo Eduardo Sívori navega hacia el naufragio, como el Museo de Arte Moderno y el Museo del Cine, que sobreviven por la voluntad de sus trabajadores. Son sólo algunos de los vaciamientos de una política cultural que ha sido refrendada, apoyada, ratificada y votada en todos los barrios porteños.
Mueve a una reflexión que este proyecto sea llevado a una escala macro, si el PRO creciera a nivel nacional, como se pretende.
En Italia, el programa cultural de Silvio Berlusconi no ha sido uno muy diferente. Hemos escrito aquí la reseña de Videocracy, la película de Eric Gandini que denuncia la “revolución cultural” llevada a cabo por el gobierno para empobrecer culturalmente al pueblo italiano, destruyendo sus valores de civilización.
Riccardo Muti tuvo un gesto de reacción durante la representación de Nabucco, de Giuseppe Verdi. El músico, que ha puesto en escena en sus óperas la valentía del pueblo italiano a lo largo de su historia, hace cantar al coro de esclavos del rey Nabucodonosor el famoso Va´ pensiero, himno de la unidad italiana y contra toda tiranía. Después de la ovación, el napolitano Muti se dirigió al público diciendo “si matamos la cultura sobre la que está fundada la historia de Italia, verdaderamente será nuestra patria bella y perdida” (como dice el coro de Verdi) e invitó al público a entonarla nuevamente, junto al coro.
Puede verse el episodio en You Tube:
Resulta algo tardía la reacción de Muti, pero no inútil. No queremos dejar pasar el tiempo y desde Claroscuros hacemos un llamado de atención, para que nuestra patria tan bella no pierda su cultura.
Josefina Sartora
No hay comentarios:
Publicar un comentario