11 de marzo de 2013

Un frustrado homenaje


Hitchcock
Dirección: Sacha Gervasi
Estados Unidos-Francia/2012


Tanto por su personalidad como por su extensa, extraordinaria filmografía, la figura de Alfred Hitchcock se ha prestado para ser objeto de films y ensayos. Con una genialidad poco frecuente, se ganó un sitio en Hollywood después de una carrera en Inglaterra, su tierra de origen.

Sacha Gervasi sucumbe a la tentación y ubica su ficción sobre Hitchcock durante la gestación y realización de Psicosis, una de las joyas de su filmografía. Es el año 1959, Hitch acaba de filmar North by Northwest, estrenada en Argentina como Intriga internacional, y en España como Con la muerte en los talones. Quiere un cambio en su carrera, intentar algo distinto: una película de terror, él que ya se ha consagrado como el maestro del thriller, el “mago del suspenso”. La Paramount, su productora, se niega a financiarla. No es fácil contradecir al maestro. Está tan convencido de trasladar esa novela de segundo orden (Hichcock no trabajaba con grandes literatos, prefería obras desconocidas; eran otras épocas, los grandes directores tampoco escribían sus propios guiones, por suerte) que decide arriesgar su propio dinero, hipotecar la mansión de Los Ángeles, donde vive con su esposa Alma Reville. Y aquí llegamos a la verdadera protagonista de este film. Alma fue estrecha colaboradora de su marido: asesora de guión, de rodaje y montaje, mujer dura, capaz de sostener  difícil contrapunto con ese ser megalómano, endiosado y siempre obsesionado con sus actrices. Una abundante bibliografía da cuenta de la relación del director con sus estrellas rubias, idealizadas, y con las morochas, que siempre llevan a la perdición. Helen Mirren le pone el cuerpo al personaje de Alma y aunque no da la esposa en las sombras por la fuerza de su propio carácter, saca el mejor partido del rol, robándose esta película. Es ella quien le da ideas geniales –la más original: matar a la protagonista a los 20 minutos de comenzada la película- es ella quien lo reemplaza cuando él enferma, demostrando que podría haber sido una excelente directora, si no hubiera elegido permanecer a la sombra del marido. Y todo lo cual transcurre mientras el matrimonio atraviesa una severa crisis, cruzando los problemas matrimoniales con los del rodaje.


La idea daba para trabajar en una gran película, que no resultó ésta. Basándose en el libro de Stephen Rebello Alfred Hitchcock and the Making of Psycho, Gervasi no explota el filón que le ofrecía la historia y sus personajes, se queda en medias tintas, banaliza la historia con un guión lavado y obvio, ajeno a las sutilezas del maestro, y nos deja pidiendo más.

Párrafo aparte para la caracterización de Anthony Hopkins como Hitchcock, en el peor personaje de su carrera. El actor ha estudiado a su personaje en sus apariciones en la legendaria  serie Alfred Hitchcock presenta, imitando al detalle su postura, su manera de hablar, su peculiar dicción cargada, su acento, tratando de parecérsele al máximo bajo kilos de maquillaje y sin aportar nada al personaje. Algo similar ocurre con James D´Arcy, elegido por su parecido físico con Anthony Perkins y no por sus dotes actorales. Desaprovechada  está la excelente Toni Colette como la fiel secretaria del director.

Son fan de Hitchcock, y considero Psicosis como una de sus obras más geniales. Tengo casi todas sus películas, las he visto todas varias veces y por esto mi juicio está teñido desde el vamos. Como todos. Pese a su título-homenaje, este film no sabe estar a la altura de sus zapatos.

Josefina Sartora

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