Pesadilla americana. El cine de David Lynch

Pablo Suárez

Buenos Aires, Cuarto Menguante, diciembre de 2013

Siempre es bienvenido un libro sobre cine escrito por estudiosos argentinos. Tenemos una mirada particular, tan distinta de la de los teóricos de Estados Unidos, Inglaterra o Francia, por poner otros ejemplos muy publicados. El crítico Pablo Suárez es un especialista en el cine de David Lynch. Tal es su fanatismo, que su imagen en Facebook siempre es algún fotograma de las películas de su director favorito. Ha publicado un libro dedicado a su obra integral, suceso poco habitual en nuestro medio, donde los críticos preferimos referirnos a títulos puntuales más que a la obra completa de un autor determinado.

Lynch es uno de los directores contemporáneos más creativos, revulsivos y polémicos de Estados Unidos. Permanente investigador de aquello que subyace bajo la epidermis de la apariencia, la escena inicial de Terciopelo azul resume toda su ideología: en un paisaje idílico del american way of life, entre casas y plácidos jardines suburbanos, bajo un cielo límpido y en la bonhomía doméstica, entre los pastos, yace una oreja cortada. Todo el cine de Lynch está dedicado a develar el horror y la crueldad ocultos bajo la apariencia de inocencia e ingenuidad. Lynch no cesa de trabajar con la ambigüedad, tanto desde la palabra, como con la imagen o las historias que presenta. Parodia los clichés del cine clásico de Hollywood con el acento puesto en lo siniestro de la cotidianeidad. O altera la línea temporal fragmentándola, dejándola quebrada así como astillados están los personajes. Con David Lynch, el sueño americano deviene pesadilla. Suárez es un buen observador, y explora esos desfasajes, esos excesos de luces y sombras, esas subversiones en un film tras otro –así como en sus series para la televisión-, sin olvidarse de evocar las fuentes a las que de una u otra forma remite Lynch.

Pesadilla americana se perfila como un libro de culto para adentrarse en la obra de un director de culto.

Josefina Sartora