Este es un festival que
siempre asegura éxitos de taquilla –como seguramente tendrá Birdman
y algunos otros-, con mucho cine mainstream
y muy poco del independiente. Básicamente está dedicado al cine de Italia,
Francia y Estados Unidos, con algo de China e Irán, y películas aisladas de
otros países, y nada más. Nada de cine español, poco del Este europeo, y de
Latinoamérica sólo la coproducción de Adrián Biniez, El cinco de Talleres, que
no podré ver porque lo proyectan después de mi partida.
La Mostra no despierta
las expectativas de antaño, está opacada por el más progre Festival de Locarno
también en agosto, el casi simultáneo Festival de Toronto, y en Italia el
Festival de Roma ha surgido haciéndole competencia. Pero sigue convocando
multitudes, la mayoría es prensa italiana, distribuidores de todo el mercado
europeo, y estrellas. Muchas. Cada día son numerosas las que arriban en lancha
de lujo al Lido, y más los fans reunidos ante la alfombra roja, que reciben a
sus ídolos a grito pelado.
Como puede observarse en
mi personal puntaje para cada film, después de haber visto 24 películas,
ninguna me ha despertado una admiración profunda. La competencia se mantiene en
una media, sin grandes hallazgos ni terribles elecciones. Entre lo ya visto, lo
mejor es la película de Oppenheimer, la de Seidel, la de Muzio, Birdman.
Pero sin fanatismos.
Venezia 71 Concorso
3 coeurs. Benoit Jacquot, Francia/2014.
**1/5 Los tres corazones del
título son los que conforman el triángulo de un hombre que ama de distinta
manera a dos hermanas muy íntimas, que se adoran. Habría que agregar un cuarto
corazón, el de la madre que calladamente se da cuenta de todo. Melodrama tan
clásico como convencional, y en enorme medida previsible, con Benoît Poelvoorde
–presente también en esta Competencia con La Rançon de la gloire- Charlotte
Gainsbourg, Chiara Mastroianni y su madre real, Catherine Deneuve. Un elenco de
lujo para un film que no lo es, que manipula al espectador con la pasión y la
angustia del protagonista cardíaco y la música suspensiva de Bruno Coulais.
Manglehorn. David Gordon Green, Estados Unidos/2014.
**1/5 Si Al Pacino
necesitaba algún tipo de recuperación, esta performance crepuscular lo reafirma
como gran actor, a pesar de sus tics y su tan criticada sobreactuación. En Manglehorn
desarrolla un personaje medio, un oscuro cerrajero que a causa de un amor
frustrado ha devenido un misántropo, patético, incapaz de manifestar cariño por
nadie que no sea su nieta y su gata. En un momento, su amiga (Holly Hunter)
dice que ama las cosas simples, como ver salir el agua de la canilla: y sí, el
guión es simple y hasta pobre, la imagen abunda en artificios e incluso
alucinaciones, señal del hombre que se quiebra, pero todo está al servicio de
la redención del actor Pacino. Prefiero El cerrajero de Natalia Smirnoff.
Loin des hommes. David Oelhoffen, Francia/2014.
** Viggo Mortensen es el
protagonista de esta road movie basada
en una obra de Albert Camus, a través de las montañas pedregosas del Atlas: un
maestro que debe trasladar un prisionero árabe mientras se está gestando la
lucha por la independencia argelina. Un viaje (y un film) que dura más de lo
necesario, tedioso, con lugares comunes, con mensajes políticamente correctos,
que se pretende humanitario al hablar del encuentro entre las diferencias. El
mayor anticlímax se logra cuando después de un viaje de muerte y dolor caen en
un burdel que atiende Angela Molina mientras Gardel canta en un disco El día que me quieras (sic). Los franceses habrán de seguir
revisando su acción en Argelia.
The Cut. Fatih Akin, Alemania-Francia-Polonia-Turquía-Canadá-Rusia-Italia/2014.
* Este
año la Mostra se ocupa de varios temas políticos e históricos. Después de la
rebelión argelina en Loin des hommes,
el film épico del Concorso narra la saga del genocidio armenio y sus
consecuencias. Parece haberse perdido el genio para la épica en el cine actual.
Con una torpeza que no había mostrado en sus films anteriores, el turco-alemán
Fatih Akin no cesa de rozar el ridículo en este cuadro de guerra, pérdida,
desolación. Encarada como una costosa superproducción, sigue la historia de un
armenio (un muy limitado Tahar Rahmin) desde que es apartado de su vida feliz
familiar -sin que medien explicaciones de por qué los armenios son perseguidos-,
ve destruida su familia y su etnia, atraviesa Medio Oriente (¿acaso tiene
superpoderes?), va a América en busca de sobrevivientes –Cuba, Estados Unidos
(¿todos viajan a Minneapolis en esta Mostra?)-, etc etc. Eso sí: todos los
armenios hablan inglés entre sí, hay que cuidar el mercado yanqui. El guión no
podría ser más elemental, los diálogos fueron armados con lugares comunes (por
suerte el protagonista queda mudo a poco de comenzar la guerra) y los
personajes derivan de estereotipos. ¿Cómo está este film en Concorso? ¿Cómo
alguien financió este film? ¡Y dura 137 minutos!
Orizzonti
Tavka su prativa
(These are the Rules). Ognjen Sviliĉić,
Croacia-Francia-Serbia-Macedonia/2014.
***1/5 Drama familiar que presenta un interesante aspecto social, este film narra
un hecho delictivo con consecuencias dramáticas, afectando a una familia que
debe atravesar la indiferencia del sistema (en Zagreb, pero podría ser en
tantos lugares). Médicos, policía, burocracia, nadie parece interesarse. Ante
la falta de justicia, sólo queda la venganza. Otro relato salvaje, narrado con solvencia, duro, seco y austero, sólo
desarrolla lo necesario y es hasta ahora lo mejor que vi en la competencia
Orizzonti.
Fuori concorso
She´s Funny That Way. Peter Bogdanovich, USA/2014.
*** En un festival de
este tipo no podía faltar la comedia americana mainstream, aquí a cargo de Peter Bogdanovich. Un obvio homenaje a
la screwball comedy de los años
dorados de Hollywood, con el recuerdo explícito de Lubitsch, y otros de Hawks y
tantos. Comedia de enredos, de parejas que se cruzan, en un torbellino, de
situaciones equívocas en las que reina la confusión en todos. Y son muchos, y
conocidos: Owen Wilson, Jennifer Aniston, Imogen Poots, Kathryn Hahn, Cybill
Shepherd y más, cruzándose en sitios emblemáticos de Nueva York. Siguen con
gracia las huellas de Woody Allen, pero sin aquella genialidad que supo tener.
The Humbling. Barry Levinson, Estados Unidos/2014.
***1/5 Nuevamente Al
Pacino en la Mostra. Y nuevamente, vive una redención, en su excelente
composición de otro hombre en espiral decadente. Basada en la novela La humillación del gran Philip Roth,
Levinson le imprime humor a la historia, y Pacino le otorga patetismo al
personaje de un actor teatral en crisis (son varios los films que abordan el
tema: Birdman, tangencialmente She´s Funny That Way, ahora éste). El
film encara también un tema tan común a los actores: el cruce entre fantasía y
realidad, la dificultad de discernir entre ambos, no saber si es vida real u
obra teatral, se vive y se actúa a la vez, se fantasea con la idea del
suicidio, etc. Greta Gerwig y Diane Wiest acompañan a Pacino en esta parodia de
sí mismo, en un film íntimo, farsesco, por momentos ridículo, en el cual Pacino
se ríe de su propia vejez.
Josefina Sartora
No hay comentarios:
Publicar un comentario